jueves, 23 de julio de 2009

Su sistema podría estar en peligro.(tercera parte)

17 de Septiembre de 2008

11:23 Am

Federico Hernandez llegó atrasado a la oficina. Sabía que eso le iba a costar una amonestación, tal vez no en dinero, pero si un reto de su jefe directo. Y no estaba nada de bien sabiendo que llevaba tan solo unos pocos días en aquel trabajo. Se hubiese levantado a la misma hora de siempre, se hubiese duchado y tomado una taza de té cargado con unas tostadas; pero no había podido cerrar los ojos para descansar hasta altas horas de la madrugada.
La muchacha
ella tenía la culpa.

O mejor dicho, tenía la razón. El accidente que le había predicho sucedió con la misma exactitud en tiempo y en contenido...¿Cómo rayos podría ella saberlo?
Federico nunca había creido en las cosas que no tienen explicación; para él eran nada más que tonterías de gente ignorante que no tiene los argumentos suficientes como para darle un entendimiento a lo que los rodea.
Pero esta vez era completamente distinto, porque le había ocurrido a él. Y no era nada de grato.

Abrió la puerta de su oficina, se sacó rapidamente el abrigo y lo colgó en el perchero. Encendió el computador con una mano, al mismo tiempo que con la otra encendía la cafetera; no podía empezar el día sin una buena taza de café caliente.

Y entonces reparó en el sobre sobre su escritorio.

No se lo había llevado para su hogar, pero tampoco lo había arrojado a la basura, como lo había pensado hacer apenas se fue la muchacha.
Pero ahi estaba el sobre, esperando a que lo abriesen. Tenía que salir de las dudas, sobre qué era el contenido tan importante, que iba a "decidir el destino de miles", o algo por el estilo, segun las palabras de la chica.

Federico se sentó, acomodándose en la silla. Tomó el sobre con ambas manos, y con un movimiento rápido, lo abrió por su parte superior. Y vió lo que había dentro.





12:08 PM (del mismo día)

-¡Fernando, espera un momento!- gritó Federico, antes de que su amigo pusiera un pie dentro del ascensor.
Fernando Acosta se dio media vuelta y lo miró. Federico venía corriendo por el pasillo, agitando un sobre para llamar su atención "este se volvió loco" pensó, dejando el maletin apoyado contra su pierna izquierda.
Federico llegó a su lado, respirando rápidamente. Fernando esperó a que recuperara el aliento antes de preguntarle porque diablos venía corriendo y gritando de esa manera.
-okey- le dijo -aqui estoy. puedes decirme ahora que mierda te pasa?-.
-Necesito...que...me ayudes...por favor- le dijo Federico, mirandolo con ojos desesperados.
-tu te volviste loco, verdad?- le responde Fernando- Corriendo y gritando de esa manera, que esperas que ocurra? te van a despedir en cualquier momento!!! con todo lo que te costó entrar a esta empresa; si te viera alguno de los peces gordos, te expulsarían al instante- tomó a su amigo de un hombro, y lo empujó suavente hacia las escaleras. Abrió la puerta de acceso, y ambos salieron al descanso entre pisos. Fernando seguía mirando fijamente a su amigo, tratando de descubrir aquello que lo aquejaba.
-muy bien, aqui podemos hablar tranquilos. Dime ahora, que es lo que te ocurre...-.
-Fernando, tienes que ayudarme-le dijo Federico, angustiado- acabo de recibir una de la noticias más terribles que me podrían haber dado...mira- y le mostraba el sobre- aqui dentro hay información que podría volver loco a cualquier persona. Es información precisa, exacta, de acontecimientos que estan por venir... cosas que van a ocurrir. Y todo esto tiene que ver conmigo, con cosas que todavía no llevo a cabo, pero que haré, y que van a causar..bueno por eso mejor que lo leas tu- y le entregó el sobre a Fernando
Fernando lo recibió, mirando con absoluta desconfianza todo lo que estaba ocurriendo. Abrió el sobre, sacó un montón de papeles, un dvd , y una pequeña caja negra. Comenzó a hojear los documentos, hasta que llegó al final.
-Federico- le dice- ¿Quien diablos es Gonzalo Hernandez?-.

Federico cierra los ojos. Traga saliva. Siente la boca amarga.
-Creo que es mi hijo- responde.


(continúa).

miércoles, 22 de julio de 2009

Su sistema podría estar en peligro.(intermedio)

18 de Septiembre de 2010

15:23 Pm

Tomó el arma con la mano derecha. El sonido del disparo no se le iba de los oidos. A lo lejos, se escuchaban los ruidos de la ciudad, siempre inquieta, siempre despierta. También se oían las sirenas de los carros policiales que se movilizaban rápidamente hacia ella. Venian por ella, pero ya no importaba demasiado.
Miró el cadaver que yacía en el suelo, boca arriba, con una expresión bastante estúpida pintándole el rostro. O lo que quedaba de él. La bala había entrado por el borde del labio superior, hizo lo suyo, y salió con un chorro de sangre y sesos por el cráneo, como si un pequeño volcán hubiese hecho erupción. Y ahora estaba en el suelo.
-Dos años me demoré en matarte, hijo de puta- dijo ella, en voz alta. Casi como un comentario forzado.
La policía estaba llegando. La mujer dejó la pistola en el suelo, y se puso de rodillas con las manos detrás de cabeza.
Se acercaron, se abrieron las puertas
se escucharon las voces de mando.
Ella cerró los ojos. Esperando. Y llegó el momento.
El cielo se llenó de una intensa luz blanca. Los pajaros arrancaron. Y un murmullo, como truenos subterraneos, avanzaba a toda velocidad.
"Lo logró" pensó la mujer "esa chica lo logró...tenía razón despues de todo"
Apretó aún más su mandibula. Los policias gritaron, y luego desaparecieron
Había llegado el momento...
Su último pensamiento fue bastante agradable; Se vió a si misma, décadas atrás, parada frente a la puerta del salón de baile, en su graduación. Su muchacho, su pareja, la miraba comosi fuese la mujer más bella del universo. Y asi se sintió; amada, querida, deseada. Ella se empinó y le dio un suave beso en los labios. él le sonrió. La mujer aun con los ojos cerrados, sonrió también, y su pensamiento flotó unos segundos, antes de sumergirse en la oscuridad.

(fin del intermedio)

lunes, 20 de julio de 2009

De las idas y vueltas

Te levantas con los años en cuenta regresiva
me levanto, camino, paso frente a tu ventana
te despiertas y pareciera que el calor fuese efímero

Es otoño pero con sabores a primavera consumada
yo regreso, te juro que regreso con las manos en alto
porque no tengo esa idea de culpa entrometida
no, señora, no la integro
Y tu, bailarina, te mueves en tu día soñadora
los pies en alto (el alma) riendo
el mar de emociones que cae
efecto dominó
las ensaladas de abrazos te alcanzan perfecta
perfecta en sonrisa
armonía de canciones
cuales son tus temas favoritos?
Te levantas, con los años en cuenta progresiva
adelante te construyen un puente de cristal
y dos copas de champaña que chocan estridentes
Yo sigo, damisela de cuento infantil, yo sigo murmurando
pero con voz nueva

Y paso por tu puerta abierta
sigo pasando todos los dias por las montañas de recuerdos
no miento (casi nunca) no quiero ver
las sombras del atardecer en tu cabello
el olor a café, las tostadas con mantequilla
se derriten en tus labios pintados de crema pastelera
princesa de castillos de arena
Y vuelvo, algún dia, algún dia que no sea tu día
vuelvo cantando en mis orejas escuchando los gorriones
que trinan por tus besos lejanos
Tu vas, vas sigues
la plaza te espera atenta
los gritos de los automoviles
la baldosa rota
te tropiezas cuantas veces sea necesario
tus rodillas van también, bailan, princesa de castillo de jalea

Yo me levanté temprano
y con la voz para adentro
te entono una canción desconocida.

lunes, 13 de julio de 2009

sabado en la noche

mariposa nocturna te posas indemne en la pantalla de televisor
vieja
revolviendo las alas alrededor de una estela de humo de cigarrillo
vieja y hedionda
se marea la gente, las risas suben
un gato corre detrás de las bolsas de basuras llenas con los bigotes humedecidos
viejos y gastados
Sonrisa de pequeños coqueteos. Manos tibias y miradas inconclusas. Palabras al pasar
viejas y repetidas
la oficina tiene hedor a papas fritas
viejas y aceitosas.
mariposa nocturna te encandila la luz del sol. Fuera de foco, empañada, cochina
vieja y temerosa
mariposa nocturna te escapas al rincón de los borrachos
viejos y pestilentes.
los colores de un día sabado se mezclan con el sueño y la templanza
escondida entre los pantalones
viejos y rotos.

miércoles, 8 de julio de 2009

Fragancia

Pasaban de las 3 de la mañana;
Pasaban los minutos apurados en fila india
caminando como hormigas
Y la Trofolaxis con aroma a vino en caja
Pasaban también los automovilistas volando bajo
atropellando cuanto mosquito se pusiera por delante

Y pasaban de la mano las chicas
y de agarrones los chicos y de agarrones apretados
con garras de sexo casual
Y pasaban con lenguas de fuego mirando los locales cerrados

Y pasaban los perros hambrientos moviendo la cola
Y pasaban los cuidadores de autos bailando en su cumbia ebria
Y pasaban las estelas a marihuana barata
Y pasaban las putas apuradas por un gramito

La Fragancia, inundaba
cada rincón de la calle
Olor a ciudad cansada
A ciudad derrochadora de tristezas disfrazadas
olor de Santiago nocturno y juguetón.

miércoles, 1 de julio de 2009

Tu historia

Contaba tu historia casi como si fuese mía;
porque en mis labios recreaba tus pasos lejanos,
cerraba los ojos y casi podía verte recorriendo los prados infinitos
el verde fresco, las gotas de lluvia acumulándose entre los árboles;
Porque era el Sur tu cuna, tu tierra prometida
y en mi causaba admiración y belleza inmensa...

Y me encontré con esas imágenes un invierno callado
rescaté de las memorias los fragmentos de una tierra lejana
los tomé: los robé y ahora
!como mi alma sueña con perderse entre los bosques milenarios!!
mi casa
se construye
entre tus sueños también...
Me alejo, me voy donde los caminos no terminan
arriba; lejos perdido entre las montañas nevadas
no quiero que me detengas
solamente toma mi mano una vez más
dejame sonreirte y contarte un mal chiste
y vamonos a fumar un cigarro de tabaco húmedo
nos sentaremos entre las cenizas de un pasado citadino
y vamos a mirar el horizonte juntos como si ya nada más
como si nada más (y nada menos) que la esperanza sea nuestra almohada
en aquellas noches de lluvias torrenciales
donde las palabras sean llevadas por el viento
y solamente queden tus ojos
para perderme en ellos.